Al ser una de las industrias que más dinero mueve, el mercado inmobiliario se presta a una serie de actos delictivos que con información y precaución cualquier persona puede evitar. Aquí te compartimos algunos consejos:
Si tienes que hacerlo, acércate primero a un notario para que revise los antecedentes y obtenga certificados de libertad de gravámenes, de no adeudo y de zonificación. Así sabrás si tu vendedor está autorizado, si el inmueble está libre de gravámenes y adeudos, y si se encuentra en la situación jurídica necesaria para ser vendido.
Una de las estrategias de fraude más común es la suplantación de identidad. Para evitarla, es indispensable que conozcas personalmente a tu vendedor. Si después del encuentro tienes alguna sospecha sobre quién dice ser, acércate a tu notario y plantéale tus dudas para hacer una investigación más minuciosa.
Aunque no es una mala práctica en sí, la preventa tiene algunos riesgos. El principal es que, durante el proceso de construcción, el desarrollador se quede sin dinero. Por eso, siempre:
Si haces un pago previo en efectivo que exceda el límite establecido por la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, es posible que no puedas formalizar la adquisición en una escritura pública. Por eso, es mejor hacer los pagos a través de un sistema financiero. Si por algún motivo tienes que hacer el pago en efectivo, verifica que se encuentre dentro de los límites establecidos por la ley.
Cualquier inmueble que haya pasado por un juicio puede tener etapas procesales pendientes que implicarán la posibilidad de que la adquisición se retrase o se pierda. Si vas a comprar una propiedad de este tipo revisa, con la ayuda de un especialista, todos los aspectos del juicio y del inmueble para que tengas claras las ventajas y los riesgos que implica.
Esperamos que estos tips te sean de utilidad. Si requieres una asesoría personalizada para llevar a cabo un proceso de compraventa, puedes contactarnos aquí. Con gusto te ayudamos.